La expresión del alma: la creatividad.

El ser humano tiene necesidad de ser creativo  porque esta creatividad nos hace sentir Vivos. Desde niños tenemos deseo de jugar, improvisar, cantar, dibujar; en definitiva, de expresarnos. Poco a poco las distintas vivencias nos vuelven pasivos, inertes, apagados, rígidos. Tememos expresarnos, tener nuevas ideas, crear algo, tememos hacer el ridículo; tenemos  sentimientos de incapacidad, miedo a lo que piensen los demás y como consecuencia nos vamos refugiando en el conformismo, en la rigidez, perdemos la espontaneidad, la naturalidad y el brillo en los ojos.

Crecimos rodeados de personas que, sin querer, nos han ido desanimando frente a la expresión de nuestra parte creativa: un profesor, padre, familiar  que nos decía: ”El dibujo no es lo tuyo”, “No tienes flexibilidad para el baile”, “Tienes un oído frente al otro“…¿Te suena?.

Después esa voz la hemos incorporado como parte de nuestra Voz Interior que nos  inhibe y bloquea; pero cuando conseguimos expresarnos de verdad…¡¡cambian muchas cosas!!. Nuestra energía psíquica circula con aquello que realmente nos importa, y lo que nos importa es mostrarnos como somos y conectar de forma auténtica con los demás, tener relaciones de verdad.

Descubrimos que yo tenemos algo que decir; cuando nos expresamos se reorganiza nuestra personalidad, se asume nuestro mundo emocional, se comprenden y se transforman aquellas emociones que nos hacen daño. Nos conocemos mejor y, por consiguiente, comprendemos el mundo que nos rodea.

Y es que  la creatividad da voz a nuestra  parte Esencial, nuestro verdadero Yo. Relegamos a un rincón a nuestro  urgente, temeroso y ansioso Ego; lo que nos proporciona  serenidad y paz interior. Dejamos salir a la superficie nuestra esencia reprimida por nuestro falso yo creado por la mente. Recobramos la alegría del SER.

Las formas de expresión creativa son muy diferentes:  desde la cocina, la escritura, el teatro, el baile, la fotografía,  la música,  la pintura, el modelado de arcilla, etc. y es que en esta expresión todo gira alrededor de lo bello y de la libertad.

El impulso creativo es una necesidad atávica desde hace miles de años. Según Steven  Hithen la expresión artística es el resultado de tres aptitudes previamente presentes en el cerebro humano: producir una imagen mental y comprender su significado y saberlo transmitir a los demás.

Cuando estas tres inteligencias distintas se combinaron, se produjo un salto cualitativo en nuestra evolución. Ser creativos significa volverse plenamente humanos ya que todos los humanos tenemos potencialidades creativos que tienen un efecto beneficioso en la salud física y mental.

Helen Nissanayake hace un análisis biológico y evolutivo del arte, afirmando que en la expresión artística se utilizan habilidades como la disciplina y la persistencia, la destreza manual, la capacidad de resolver problemas, de forjar y contar historias y de crear representaciones visuales. Son maneras con las que durante  millones  de años varias poblaciones humanas han afirmado su identidad cultural, le han permitido a sus miembros sentirse parte de un todo más grande, afrontando y resolviendo sus ansias así como las fantasías más terribles.

En el campo de la medicina son numerosos los estudios  que dan cuenta de los beneficios de la expresión creativa: hacen más tolerable la quimioterapia, disminuyen el nivel del dolor en procesos cancerosos disminuyendo las dosis de analgésicos, mejora las funciones del sistema inmunitario, disminuye el estrés, los síntomas de la depresión y un largo etc.

En el ámbito escolar: aumenta el rendimiento del alumno  y la capacidad de afrontar problemas complejos, entre otras mejoras.

En  el campo del desarrollo personal y de la psicología la expresión emocional a través de cualquier forma creativa, ayuda a curar heridas emocionales; ya que, nos permite expresar nuestro mundo emocional y nos proporciona libertad para buscar a través del arte, la Verdad, la Bondad y la Belleza que llevamos dentro, liberándonos de las cadenas  del miedo y la falsedad, despojándonos de las mascaras de nuestro ego y nuestros condicionamientos.

Cualquiera de nosotros puede ponerla en práctica en la vida cotidiana y en la profesional. Debemos considerar que no es patrimonio de grandes sabios o artistas. Cada momento es una ocasión para la creación y por lo tanto para la alegría. Somos nosotros, mediante la potencia creadora de nuestra alma, los que damos lugar a la expresión creativa  y encontramos la Libertad.

“La creatividad no es un logro del intelecto, sino el instinto de juego que actúa a partir de una necesidad interior. La mente creativa juega con los objetos que ama”. C.G. Jung.

Te animo a que busques tu propia creatividad: escribe un blog, toca el ukelele, expresa quien eres, busca tu belleza y la del mundo que te rodea, mira a tu alrededor con ojos de niño porque esa Belleza te salvará.

Fuentes:

“La libertad de ser”. Annie Marquier, Ed. Luciérnaga 2017.

“Belleza para sanar el alma”. Piero Ferrucci. Ed. Urano 2009